jueves, 23 de octubre de 2008

Vida monástica

Alguien me preguntó que profesión habría tenido de haber sido hombre, en un atimo respondí SACERDOTE,yo misma me sorprendí de mi respuesta, aun cuando se bien por qué, tiene que ver con el hambre de conocimiento insaciable que tengo, por ciertas caracteristicas arquetipales es decir del arquetipo del sacerdote o sacerdota, sacerdotiza en mi...

...Nuevamente vuelvo a vivir una vida cuasi monástica, horarios,poco espacio, dieta frugal, intenso estudio, y oración;solo me molesta el poco espacio.

Muchas veces había pensado en lo innecesaria de algunas vivencias personales, por dramáticas, fuertes, atemporales, solo que en este momento de mi vida pareciera que el rompecabezas comienza a tener forma y las imagenes, antes dispersas encajan en una suerte de interminable cadena de eventos, antes desvencijados y ahora unidos de manera inmanente, sin que mi mente alcance a advertirlo pero consciente de los hilos providenciales tejiendo serenamente el tendido de mi vida. Incluyendote a ti.

MG

jueves, 9 de octubre de 2008

Amar

¿Realmente sabré lo que es amar,? ¿habré amado en verdad,? dijo SAn Juán de la Cruz "Solo los Amados Aman", no se si lo he hecho, ahora se que el amor no es una llamarada que abrasa todo cuanto toca, ni un corazón desbocado, ni tristeza desgarradora, "ni toma este puñal abreme las venas" es verdad esa oración, ahora lo se, es paciente, es una brasa que no se apaga pero no fuego escandaloso, se mantiene, está calmo, te aquieta con solo verlo, te devuelve a la orilla, posa su cabeza en tu espalda y murmura jaculatorias inaúdibles pero hermosas...
Te amo.

domingo, 5 de octubre de 2008

Viaje a Buenos Aires

Buenos Aires es una ciudad a la cual sencillamente amo, es femenina y masculina, predomina en ella un encanto apasionante, te enamora sin saberlo, y luego sin poder olvidarla...Volví luego de casí diez meses de haberla dejado, volví emocionada, espectánte y ahí estaba, exótica, elegante, virtuosa, y muchas veces demencial...Me recibió de nuevo con su clima cambiante con sus aires buenos, y sus deseos de sofocarme...tomé lo que necesitaba y como buena amante me dejó partir de madrugada, sin preguntarme: ¿volverás,? me marche sin mirar trás de mi, tal vez, para no sentir q me quería quedar o para no asumir q deseaba irme, pero, me fui, satisfecha, serena, consciente de lo perdurable del amor y ella mi Buenos Aires siempre estará para mi.